Cuando llegues a los Emiratos Árabes Unidos junto a tu escort internacional, apenas pongas un pie en el aeropuerto, verás escudos y banderas del país. Esto no tendría nada de especial, salvo por la omnipresencia de la figura de un halcón.
Es el ave nacional, criada, cuidada y mimada con esmero. Sucede que los halcones y los beduinos (los habitantes ancestrales de esos desiertos) son inseparables desde tiempos inmemorables. Las aves ayudaban a cazar las escasas presas que podían encontrarse en aquellos páramos arenosos. Y a cambio recibían cuidados y alimentos.
Se forjó una alianza tan fuerte como la que se creó con perros o con caballos en otras latitudes. Y no es nada exagerado, porque desde siempre ha apasionado a miles de ciudadanos árabes. Por lo general emplean halcones de las especies “saker” y peregrino. Este último, famoso por ser el animal más rápido del planeta, es muy costoso de obtener.
Algunos bromean diciendo que el peregrino es “el Rolls Royce de los pájaros”. Tiene lógica, porque al igual que esos vehículos de lujo, solo están al alcance de unos pocos privilegiados.
Un cazador sofisticado
Una de las técnicas de caza que los distingue de otros depredadores es que se los puede entrenar para que entreguen a sus presas sin matarlas. Esto es muy importante allí. Es que el Islam impone que los animales utilizados para la alimentación deben estar vivos cuando les cortan la garganta. Eso es para extraerles toda la sangre. Así garantizan que sea carne “Halal”, acorde a las estrictas normas de alimentación islámicas.
Los Halcones tienen acceso inmediato a una atención médica de excelencia, en ¡hospitales exclusivos para ellos!, con tecnología de última generación. Son los únicos animales que en Emiratos árabes tienen permitido viajar en las cabinas de pasajeros de los aviones. Y siempre en Business y primera clase. Hasta ese punto son los consentidos del mundo árabe.
Tan cotizados como una escort internacional. O más
Estas formidables aves son hoy protagonistas de un deporte que, a ojos occidentales, es exótico, pero que en la península árabe es folclore puro. Es la “cetrería”, es decir, la caza con halcones.
Esto es todo una industria. En los Emiratos solo puede poseerse aves criadas en cautiverio. Es decir, que las crían para esta variante de la cacería, que hoy es un divertimento nacional. Pero también evoca tiempos en que eso mismo era el sustento de los primitivos habitantes de la zona. Muy poco se la practica fuera de medio oriente.
Y estos animalitos se hacen valer. Las más buscadas y caras son las hembras. Ellas superan en fuerza y tamaño a los machos (alrededor de un 30-35% más). Y pueden transportar entre tres y cinco veces su peso. Y por cierto, tienen esas características que los hacen verdaderos reyes entre las rapaces: una visión increíble, inimaginable para nosotros, y pueden volar a 350 kilómetros por hora. Una hembra criada en cautiverio puede costar hasta 100.000 euros.
Esta modalidad tan particular de cacería ha sido declarada en 2010 por la Unesco como “Patrimonio Inmaterial de la Humanidad”. “Uno de los métodos de caza tradicionales más antiguos, selectivo con las presas cinegéticas, no contaminante y respetuoso con el medio ambiente”, justifica la entidad en los fundamentos de su resolución.
Un amor milenario
Los quieren tanto que los verás en todo tipo de simbología. El ubicuo “Halcón de Quraish” se encuentra en incontables emblemas, escudos y banderas de varios estados del mundo árabe. En toda la Península arábiga son expertos cetreros. Y esto no solo implica la utilización de estas hermosas aves, sino también, por supuesto, una amorosa crianza.
Los halcones son vistos como símbolo de status, además. También se los encuentran en la tradición escrita sobre Mahoma. Afirman los teólogos musulmanes que el halcón fue usado como símbolo de su clan. O sea que tiene hasta una dimensión mística.
En los Emiratos árabes veras, con tu escort internacional, que el halcón es una presencia que marca los tiempos, la historia y las costumbres de una amplia zona de medio oriente.